Adrián Mateos encarga su quinto brazalete de las WSOP por Internet y lo recoge en el Horseshoe

Adrián Mateos acaba de confirmar su quinta victoria en las WSOP; la más atribulada, dramática y esperada de todas ellas.

Esperada por los cuatro años de sequía en las WSOP del mejor jugador latino de todos los tiempos, pero, sobre todo, por las especiales características de este High Roller Online de 3.200 $ de entrada.

Las WSOP, para darle un tratamiento especial a los brazaletes online más caros y selectos, decidió de antemano trasladar la mesa final de una pequeña selección de ellos al Horseshoe. Por eso, Adrián llevaba aguardando desde el pasado martes la reanudación del torneo, rumiando la estrategia a seguir para combatir la ventaja en fichas del único oponente al que conocía por su nombre real de toda la mesa final, Alex Kulev. Los dos High Rollers se llevan muy bien desde que repartieran los premios en el HU de 25k $ en el EPT de Praga 2022, y Adri ya intuía que el brazalete se podía acabar decidiendo entre ellos, como así fue.

Los nicks de la FT escondían peligros ocultos como otro europeo empatado a pulseras con Adri, el griego Giorgios Sotiropulos, o el especialista en eventos online Jonathan Dokler, campeón de un brazalete online y subcampeón en otros cinco.

Otro inconveniente era que el traslado a la sede oficial de las WSOP 2025 no implicaba ningún cambio en la estructura, y los niveles de 30 minutos iban a permitir jugar muchas menos manos por órbita en vivo, en comparación con los torneos online. Esto acabó jugando a favor de Adri, que antes del primer descanso ya había visto caer a cuatro rivales, dos de ellos por su propia mano, y había tomado una importante ventaja en cabeza.

Después del break, llegó la reacción de Kulev. El HU empezó con antelación, pues los dos shortstacks bastante tenían con encontrar alguna doblada a la desesperada, que no les valía para salir del pozo. Eso sí, el reparto de fichas fue muy desigual, pues si bien Amadi y Kulev se dividieron los all-ins perdidos contra ellos, fue el búlgaro el que eliminó a los dos jugadores cortos de fichas, para presentarse como absoluto favorito al HU.

Adrián tenía que remontar una desventaja de 4,5:1, y tuvo la fortuna de encontrar muy pronto un all-in y call con un as mejor que el de Alex. Más igualados, Adrián recobró el liderato sin tener que volver a poner su torneo en peligro, ganando varios botes clave sin showdown.

En la mano final, Kulev hizo un check raise en un flop doblado 772, con dos tréboles en mesa. Adrián decidió exprimir la equity de sus backdoors de color y escalera, más posibles overcards, y pagó con 68 negros. El turn le premió con un call fácil al all-in del búlgaro al traer un 8, y Kulev demostró el acierto de la jugada del flop al bajar un 52. Mucho se tenía que torcer el river para estropear el momento, y Adrián pudo empezar las celebraciones por su quinta victoria en el festival más longevo del planeta.